En la búsqueda de materiales para la incorporación de la E.S.I. en la enseñanza de las Ciencias Sociales en el aula, o al revés, para la efectiva transversalización de los contenidos de la Educación Sexual Integral en las propuestas de enseñanza, hallé y comparto un texto publicado en https://eltresde.com/ una revista digital alternativa y feminista que sigo con mucho interés.
Se trata de un texto de Florencia Romero, de Loma Hermosa partido de Tres de Febrero, politóloga de la UNSAM. La agenda feminista en Argentina: entre la visualización y la acción.
Cuando en ESI nos referimos a la igualdad entre varones y mujeres, o al protagonismo femenino en los procesos históricos o recuperamos figuras de mujeres destacadas, nos falta discutir el aporte al Producto Bruto Interno del trabajo doméstico y no remunerado. Esas múltiples y extendidas tareas sin las cuales no sería posible la subsistencia de la sociedad. Lo considerábamos, pero nos faltaban las cifras, los datos que nos permitieran contra argumentar los estereotipos y las creencias sociales. Ahora comenzamos a tenerlos. Nos informa F. Romero en su artículo:
"Una estrategia de visibilización de las condiciones de precarización en que se pretende mantener a las mujeres es la medición del aporte económico que realizan a las personas con el trabajo doméstico y de cuidados no remunerado. Con distintos antecedentes desarrollados en países de América Latina en este siglo; Argentina, a través del Ministerio de Economía, específicamente de la Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género, a cargo de la economista Mercedes D’alessandro, lanzó la primera medición de este aporte. Estos son algunos de los datos que el informe arrojó:
- “9 de cada 10 mujeres realizan las tareas de TDCNR (Trabajo doméstico y de cuidados no remunerado), que significan en promedio 6,4 horas diarias. Ellas dedican tres veces más tiempo que los varones”
- “Las mujeres presentan mayores niveles de desocupación, ganan menos y, por consiguiente, son más pobres […] las condiciones de trabajo remunerado están estrechamente ligadas a cómo se resuelven las tareas no remuneradas”
- “Las mujeres dedican más horas al trabajo doméstico incluso cuando se compara una que trabaja (fuera del hogar y de manera paga) en una jornada completa con un varón que se encuentra desempleado (5,9 horas y 3,2 horas diarias respectivamente)”
- “El aporte del TDCNR al PIB es de 15,9%. Este valor se encuentra alineado con resultados de otros países en la región, que varían entre un 15% y un 24%”
- “El TDCNR es el sector de mayor aporte en toda la economía, seguido por la industria (13,2%) y el comercio (13%). En total se trataría de un aporte de $4.001.047 millones de pesos”
- “En total, las mujeres dedican 96 millones de horas diarias de trabajo gratuitas a las tareas del hogar y los cuidados”
- En términos globales, “el 80% de los 67 millones de trabajadores domésticos del mundo son mujeres; el 90% no tiene acceso a seguridad social y más de la mitad no tiene límites en sus horas de trabajo semanales” (OXFAM).
- “La participación del sector de TDCNR sobre el PIB en pandemia es de 21,8%, y muestra un aumento de 5,9 puntos porcentuales con respecto a la medición sin pandemia”
Fuente: Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género. Ministerio de Economía.
Collage de Carla Álvarez. Profesora de artes visuales, artista y mamá. Acompaña niñxs-adolescentes en aulas y espacios de taller -Taller Crisantemo-. Sus imágenes surgen como la necesidad de un grito propio y colectivo.